Park Seo-bo (1931-2023), el maestro fallecido del movimiento monocromo “dansaekhwa», dedicó su vida a la serie “Écriture” un viaje meditativo que evolucionó y se transformó a lo largo de medio siglo.
Todo comenzó a principios de los años setenta con la “pencil-Écriture” inspirada en la escritura rudimentaria de su hijo de tres años. En esas marcas vacilantes, Park descubrió una filosofía basada en la repetición y el vaciamiento de uno mismo.
Tres décadas después, en un otoño frente a un barranco en el Monte Bandai, en la prefectura de Fukushima, Japón, contempló un paisaje iluminado por arces en tonos carmesí. Esa visión penetró su mundo en escala de grises, y el color comenzó a fluir en sus lienzos, dando nacimiento a la “color-Écriture”
Los tonos que incorporó no fueron abstracciones arbitrarias, sino tomados directamente de la naturaleza: el negro del hollín de un antiguo hogar de cocina, el amarillo brillante de los campos de colza de la Isla Jeju, el rojo púrpura del vino, el naranja del caqui maduro y el suave rosa de las azaleas.
Estas obras vibrantes y llenas de naturaleza son ahora las protagonistas de la exhibición “Park Seo-Bo X LG OLED TV: Colors Drawn from Nature,” en Coex, al sur de Seúl, organizada como parte de la feria Frieze Seoul de este año.
La muestra contrapone las obras originales de Park con “lienzos digitales” de LG OLED, donde píxeles autoiluminados reproducen sus colores con una fidelidad impactante en tono y profundidad. En este contexto, la serie “color-Écriture” entabla un diálogo con sus duplicados luminosos, como si los colores nacidos de la naturaleza hubieran encontrado una segunda vida en la pantalla electrónica.
Como socio principal de Frieze Seoul, LG OLED ha presentado estas reinterpretaciones digitales de maestros coreanos —desde el modernista lírico Kim Whanki (1913-1974) hasta el artista de abstracción en tinta Suh Se-ok (1929-2020).
Esta colaboración con LG es el primer proyecto de la Fundación Park Seo-bo (antes Fundación Gizi) tras el fallecimiento del artista en octubre de 2023, explicó Park Seung-ho, hijo del artista y presidente de la fundación, desde Yeonhui-dong en Seúl.