El recién formado conglomerado Paramount-Skydance, resultado de una fusión valorada en 8.400 millones de dólares cerrada en agosto, ha puesto sus miras en una adquisición aún mayor: la compra total de Warner Bros Discovery.
Aunque la oferta aún no está formalizada y podría no concretarse, la operación contaría con el respaldo financiero de Larry Ellison, cofundador de Oracle y uno de los hombres más ricos del mundo, cuyo hijo David Ellison dirige Skydance Media.
Una fusión que marca el inicio de una expansión agresiva
La fusión entre Skydance Media y Paramount Global, cerrada el 7 de agosto por 8.400 millones de dólares (7.240 millones de euros), culminó más de un año de intensas negociaciones para la adquisición de uno de los estudios más icónicos de Hollywood. Ahora, este nuevo gigante mediático busca consolidar su posición en el mercado a través de una adquisición que podría redefinir la industria.
Warner Bros Discovery, que tiene una capitalización bursátil de aproximadamente 33.000 millones de dólares (28.500 millones de euros), ha anunciado planes de reestructuración para dividirse en dos unidades de negocio: una enfocada en televisión por cable y otra en estudios cinematográficos y servicios de streaming.
Desafíos financieros y regulatorios
Los analistas advierten que esta megaoperación requerirá una financiación privada considerable, especialmente considerando el tamaño de Warner Bros Discovery y la actual situación financiera de Paramount. La operación deberá superar múltiples obstáculos, incluyendo la aprobación de accionistas y reguladores antimonopolio.
El mercado ha reaccionado favorablemente a los rumores: las acciones de Warner Bros Discovery se dispararon un 28,7%, mientras que los títulos de Paramount-Skydance subieron un 15,5%.
La batalla por el streaming
Esta potencial adquisición refleja la intensificación de la competencia en la industria del entretenimiento, donde los actores tradicionales luchan por ganar escala y fortalecer su presencia en el streaming. En un contexto de declive de la audiencia televisiva tradicional, las compañías enfrentan la presión de gigantes tecnológicos como Apple y Amazon, que han irrumpido con fuerza en el negocio de las plataformas digitales.
La consolidación del sector parece inevitable ante la necesidad de crear conglomerados lo suficientemente grandes como para competir en el nuevo ecosistema mediático, donde el contenido original y la distribución global son claves para la supervivencia.