Inversión Extranjera Directa en Latinoamérica, datos y perspectivas

Recuperación moderada con desafíos estructurales persistentes
21/07/2025
2 minutos de lectura

La inversión extranjera directa (IED) en Latinoamérica experimentó un crecimiento del 7,1% en 2024, alcanzando 188.962 millones de dólares, según el informe anual de la CEPAL. Esta recuperación, aunque positiva, oculta desafíos estructurales significativos que requieren atención inmediata de los gobiernos regionales y organismos internacionales.

El incremento de la IED representó el 13,7% sin embargo, estas cifras permanecen por debajo de los niveles registrados durante la década de 2010, cuando alcanzaron 16,8%. Esta brecha refleja una debilidad estructural en la capacidad de la región para atraer y maximizar el impacto de las inversiones extranjeras.

El análisis por componentes revela que el crecimiento de 2024 fue impulsado principalmente por empresas transnacionales ya establecidas en la región, especialmente a través de la reinversión de utilidades. En contraste, los aportes de capital nuevo permanecieron estancados, cayendo un 12% en 2024, lo que refleja «el bajo interés de nuevas empresas por localizarse en la región».

Brasil y México dominaron los flujos regionales, concentrando el 61,6% del total de entradas. Brasil recibió 71.070 millones de dólares (38% del total regional) con un crecimiento del 13,8% respecto a 2023. México captó 45.337 millones de dólares (24% del total) con un notable incremento del 47,9%, registrando la cifra anual más alta desde 2013.

Por el contrario, Colombia, Chile y Argentina, que ocuparon el tercer, cuarto y quinto lugar respectivamente, experimentaron disminuciones en sus entradas de IED comparadas con 2023. Este patrón de concentración geográfica plantea interrogantes sobre la distribución equitativa de las oportunidades de inversión en la región.

La distribución sectorial de la IED experimentó cambios significativos en 2024. Las manufacturas aumentaron su participación hasta el 43,6% del total regional, mientras que los servicios retrocedieron al 40,4%. Los recursos naturales mantuvieron una participación menor del 16%.

El fortalecimiento del sector manufacturero refleja parcialmente el fenómeno del nearshoring, especialmente en México, donde la manufactura representó el 53% de la IED total en 2024. 

Sin embargo, los anuncios de nuevos proyectos estuvieron dominados por inversiones en hidrocarburos, mientras que las energías renovables y sectores de mayor intensidad tecnológica perdieron participación. Esta tendencia sugiere una reorientación hacia sectores tradicionales en detrimento de industrias más sostenibles e innovadoras.

Origen de las inversiones

Estados Unidos consolidó su posición como el principal inversor en América Latina y el Caribe, representando el 38% del valor total invertido en 2024. Esta concentración refleja el fortalecimiento de los vínculos económicos hemisféricos, especialmente en el contexto de la reconfiguración de cadenas globales de valor.

La participación de la Unión Europea (excluyendo Luxemburgo y Países Bajos) cayó al 15% del total regional en 2024.

Minerales críticos: una oportunidad estratégica

El sector de minerales críticos representa una oportunidad única para América Latina en el contexto de la transición energética global. Entre 2005 y 2024 se registraron 1.152 anuncios de proyectos de inversión en minerales y metales por un valor total de 230.065 millones de dólares.

Chile, Perú, Brasil y Argentina concentraron el 84% del valor total de estos anuncios. En términos de origen, Canadá y Reino Unido lideraron con 20% de participación cada uno, seguidos por China con 14%. Esta concentración geográfica refleja tanto las ventajas geológicas de estos países como su marco regulatorio relativamente favorable para la minería.

La CEPAL recomienda utilizar la IED como «una herramienta estratégica dentro de las políticas de desarrollo productivo». El fortalecimiento de las capacidades institucionales para la promoción y gestión de inversiones es crucial. Esto incluye mejorar la coordinación intergubernamental, desarrollar sistemas de información robustos y establecer mecanismos de evaluación y seguimiento más efectivos.

En el contexto de la transformación digital y la transición energética, Latinoamérica debe posicionarse estratégicamente para capturar una mayor participación de las inversiones globales en estos sectores. Los minerales críticos representan una ventaja competitiva natural que debe aprovecharse mediante políticas que promuevan el agregado de valor local.

Los estudios empíricos demuestran que las Agencias de Promoción de Inversiones tienen un impacto positivo medible en la atracción de inversiones. Según investigaciones del BID, cada dólar destinado a promoción de inversiones ha generado hasta 56 dólares de IED adicional, mientras que cada 10.000 dólares invertidos en promoción han creado 5,5 nuevos empleos

NOTICIAS RELACIONADAS

No te pierdas