Fusiones y adquisiciones en Latinoamérica contrastes entre caídas y grandes operaciones

El mercado transaccional regional moviliza más de 65,000 millones de dólares con Brasil, México y Chile como protagonistas, mientras sectores clave anticipan una reactivación
01/10/2025
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El mercado de fusiones y adquisiciones en América Latina atraviesa 2025 con un panorama complejo que combina señales de desaceleración con operaciones de alto impacto. El mercado transaccional ha registrado un total de 1,855 fusiones y adquisiciones por un importe de 65,252 millones de dólares, cifras que suponen un descenso del 5% en el número de transacciones y un incremento del 21% en valor, según datos de consultoras especializadas.

Este comportamiento dual —menos operaciones pero de mayor envergadura— refleja una tendencia hacia transacciones estratégicas de gran calado, donde los inversores priorizan calidad sobre cantidad. 

Brasil, México y Chile: el tridente que sostiene el mercado

Brasil, México y Chile se espera que continúen dominando las inversiones en 2025, con Argentina y Colombia posiblemente manteniendo una trayectoria de crecimiento. Brasil se mantiene como el líder indiscutible del mercado regional: encabezó la región con 399 transacciones, por un total de 35.000 millones de dólares.

El caso argentino merece especial atención. En 2024, el país registró 99 transacciones por un valor de 8,900 millones de dólares, un desempeño impulsado por la normalización económica del Gobierno nacional. Esta recuperación posiciona a Argentina como un mercado emergente a vigilar en el panorama regional.

Entre las transacciones más destacadas de 2025 sobresale la adquisición de OCESA, la principal promotora de eventos musicales de México. Live Nation Entertainment completó la adquisición de un 24% adicional en Ocesa, empresa dedicada a la producción de eventos musicales, tomando el control del 75% de la empresa.

Los analistas identifican varios sectores con potencial de dinamismo para el resto del año. La tecnología, las energías renovables, el sector financiero y el entretenimiento siguen atrayendo inversiones significativas. El apetito por activos digitales y plataformas tecnológicas continúa robusto, mientras que la transición energética impulsa operaciones en el sector de renovables.

Las expectativas para Brasil, México y Chile apuntan a que continuarán dominando el mercado, beneficiándose de marcos regulatorios relativamente estables, tamaño de mercado y madurez institucional. Sin embargo, la volatilidad macroeconómica, las tensiones geopolíticas globales y las incertidumbres regulatorias en varios países de la región representan riesgos que los inversores evalúan cuidadosamente.

El dinamismo del mercado de fusiones y adquisiciones en América Latina convive con complejidades jurídicas significativas. Los marcos regulatorios heterogéneos entre países, los procesos de aprobación antimonopolio cada vez más rigurosos, y las diferencias en normativas laborales, fiscales y ambientales agregan capas de complejidad a las transacciones transfronterizas.

Los sectores mas destacados son: 

Tecnología y digitalización: El sector tecnológico continúa atrayendo inversiones robustas. Fintechs, plataformas de comercio electrónico, empresas de ciberseguridad y proveedores de soluciones en la nube protagonizan múltiples operaciones. La aceleración digital post-pandemia se consolida como tendencia estructural.

Energías renovables: La transición energética impulsa adquisiciones en generación solar, eólica, almacenamiento de energía e infraestructura de transmisión. Fondos especializados en ESG (environmental, social and governance) priorizan activos que combinen rentabilidad con impacto ambiental positivo.

Agronegocios y alimentos: Latinoamérica, como potencia agrícola global, atrae inversiones en producción, procesamiento, distribución y tecnologías agrícolas. Las empresas que combinan producción tradicional con innovación biotecnológica concentran interés particular.

Infraestructura: Carreteras, puertos, aeropuertos, telecomunicaciones y servicios públicos ofrecen flujos predecibles de largo plazo que atraen fondos de pensiones, aseguradoras e inversionistas institucionales.

Salud y farmacéutica: El envejecimiento poblacional, expansión de clase media y mejoras en sistemas de salud impulsan inversiones en hospitales, clínicas, telemedicina, diagnóstico y distribución farmacéutica.

Para el segundo semestre, los analistas anticipan un posible repunte impulsado por: la normalización de condiciones macroeconómicas en varios países, el avance de reformas estructurales que mejoran el clima de negocios, la necesidad de fondos de private equity de materializar salidas de inversiones maduras, y el interés continuo de multinacionales por expandir su presencia regional.

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