Uruguay encuentra oportunidades en medio de la política arancelaria de Trump

El país se posiciona favorablemente ante las nuevas medidas comerciales estadounidenses que afectan más severamente a otras naciones
17/08/2025
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En un contexto de endurecimiento de la política comercial global, Uruguay ha logrado mantenerse en una posición relativamente privilegiada dentro del nuevo esquema arancelario implementado por la administración de Donald Trump en 2025. El mandatario ordenó un gravamen universal del 10% para todos los socios comerciales de la potencia norteamericana, sin embargo, el impacto para Uruguay presenta matices que podrían traducirse en ventajas competitivas.

La estrategia comercial uruguaya ha demostrado su solidez al ubicarse en el nivel base del sistema arancelario estadounidense, evitando las tasas adicionales que afectan a aproximadamente 70 países. Junto con el resto del Mercosur, el país quedó en el piso del listado de las nuevas tasas, lo que genera expectativas positivas entre los sectores exportadores nacionales.

La aplicación de la tarifa base del 10% deja comparativamente mejor ubicado a Uruguay que a otros 70 países que afrontarán aranceles adicionales, de manera que existe una ventana de oportunidad para una mejora de la competitividad en el mercado norteamericano. Esta situación podría permitir al país ganar participación en segmentos donde tradicionalmente compite con naciones ahora más gravadas.

Estados Unidos se ha consolidado como el tercer destino de las exportaciones uruguayas en 2024, convirtiendo esta relación comercial en un pilar fundamental de la economía nacional. El sector agropecuario uruguayo, tradicionalmente competitivo, será el más beneficiado por esta coyuntura favorable.

Las medidas de Donald Trump suponen un incremento para las colocaciones y afectan principalmente al sector agropecuario, aunque en el caso uruguayo, el impacto se ve mitigado por el tratamiento arancelario preferencial que mantiene el país. Uruguay continúa beneficiándose de ciertos programas comerciales que facilitan el acceso de sus productos al mercado estadounidense.

La Cámara de Comercio Uruguay-Estados Unidos ha destacado la importancia del Sistema Generalizado de Preferencias (SGP), que otorga un tratamiento arancelario preferencial a más de 5.000 productos importados provenientes de casi 150 naciones en desarrollo, que entran exentos de impuestos y derechos aduaneros.

Más allá del comercio: una alianza integral

Las relaciones entre ambos países trascienden el ámbito comercial y se extienden a la cooperación en seguridad y defensa. La exjefa del Comando Sur estadounidense, Laura Richardson, destacó en 2024 la importancia estratégica de esta asociación al considerar a Uruguay como «un socio valorado y respetado en seguridad», con el que Estados Unidos mantiene vínculos durante «más de siete décadas».

Esta declaración subraya la dimensión geopolítica de la relación bilateral, en la que Uruguay aporta estabilidad democrática y experiencia en misiones internacionales de paz, mientras que Estados Unidos ofrece cooperación técnica y acceso preferencial a sus mercados. La solidez de esta alianza histórica constituye un factor adicional que favorece el clima de confianza para las relaciones comerciales.

Mientras el panorama comercial global se caracteriza por la incertidumbre, Uruguay ha optado por mantener una estrategia de estabilidad y previsibilidad en sus relaciones comerciales. Esta aproximación, combinada con la calidad de sus productos, la confiabilidad de sus cadenas de suministro y una alianza estratégica consolidada durante décadas, posiciona al país para aprovechar las oportunidades que surgen de la reconfiguración del comercio internacional.

Los expertos coinciden en que, aunque existen desafíos por la política comercial más restrictiva de Estados Unidos, Uruguay cuenta con las herramientas y la flexibilidad necesarias para navegar exitosamente este nuevo escenario, manteniendo y potencialmente expandiendo su presencia en el mercado norteamericano.

La clave del éxito radicará en la capacidad del país para capitalizar su posición comparativamente favorable, diversificar su oferta exportadora y fortalecer los vínculos comerciales que han caracterizado históricamente la relación bilateral con Estados Unidos.

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